El pasado sábado 7 de agosto y después de llegar tarde a las inscripciones de Castro (donde nuestro compañero Javi Veci estuvo representando a los "riojanos"), decidí acudir al Triatlón que nuestros compañeros de la Federación Navarra organizaban en Pamplona, concretamente en el Club de Natación Pamplona. Allí acudí junto a mi padre, que se quedó maravillado con la ciudad, las instalaciones del Club y con la organización del evento.
Fui el único del club que acudió a la prueba y me parece una pena, porque en contadas ocasiones tenemos la oportunidad de tener un triatlón tan bien organizado y cerca de casa. De todas formas no me encontré sólo, hasta allí acudieron otros riojanos: Jesús Inda, Javier Ibáñez y Adrián Jiménez el C.D. Calahorra.
Se dieron tres salidas: la primera de chicas, luego veteranos y SUB23 y por último, sobre las 10:30 el resto de chicos. En la natación, iluso de mí, intenté salir delante para conseguir alguna ventajilla, pero la táctica no fue la más correcta: Me llevé palos de los 50 nadadores que me pasaron por encima en los primeros 500m. A ver si después de 10 años con esto de los tris, aprendo algún día a colocarme en el sitio que me corresponde. El ritmo no fue malo, pero me cargué bastante debido a la falta de entreno (en total tengo registrados 8400m desde el 1 de abril…).
La primera transición algo más lenta de lo normal, porque eso de quitarme el traje todavía no lo tengo muy conseguido. Y en la bici pues lo de siempre: a agachar la cabeza, apretar intentando llevar la máxima cadencia posible y a esperar a que me pase todo el mundo. Me hizo mucha ilusión cruzarme con los calagurritanos y verles muy fuertes. El acople lo había adelantado un poco y la verdad es fui muy cómodo con la posición. En los últimos 6 o 7 kilómetros de bici sufrí bastante. Aunque no estaba permitido el drafting, verte sólo sin ninguna referencia se me hizo más duro de la cuenta. Pero bueno.
Llegué a la segunda transición con una media de 31km/h en el contador, que debido a mi estado de forma (el habitual en estos últimos 3 o 4 años) me dio mucha moral para afrontar la carrera. Hice una buena transición y en los cinco primeros kilómetros de carrera me dio la sensación de adelantar a 4 o 5 triatletas, lo cual me dio más moral. Pero el entreno es el que te da la fuerza, y como 1400km de bici y 550km de carrera (desde octubre del año pasado) no es que se pueda catalogar de un entreno serio, pues me tocó reconciliarme con mis miserias en los últimos 5km de la prueba. Acabé dignamente en el maravilloso “de-la mitad-pa-lante” que es conseguir el puesto 69 de los 143 que comenzamos la prueba. Todo un éxito.
P.D.: Como buen triatleta aficionado, me puse calcetines para no rozarme…
Carlitos
